Un reportaje de Corredores de Ideas



Javier Flores / La Fábula de Plinio
Museo Vostell Malpartida
01Dic2017

La Fábula de Plinio fue realizada por primera vez en la villa romana de Almedinilla (Córdoba) en 2015, dedicada al origen de la pintura a través del relato del historiador romano Plinio el Viejo.

Se cuenta en el mismo que la hija del artista Butades, enamorada de un joven corintio que se disponía a marchar al extranjero, trazó la noche de la despedida, el perfil de su rostro sobre un muro iluminado por una lucerna. De este modo registró sobre la pared la imagen del amado, como una presencia que sustituye la ausencia de la persona que se va.

Esta leyenda sirve al artista para realizar una performance en la que reflexiona sobre la génesis de la imagen (pictórica y fotográfica) como residuo resultante de interponer una realidad, entre a una fuente luminosa y una superficie sensible.

Utilizando diversos tipos de luces (bombilla de tungsteno, linterna con sistema intermitente, flash estroboscópico, puntero, linterna y fluorescente ultravioleta) el artista ilumina diversos tipos de superficies fotoluminiscentes (la misma pintura que permite que las agujas de los relojes se vean en la oscuridad) que literalmente se impregnan de luz y tarda unos instantes en desaparecer.

Fuente: Javier Flores

[El reportaje]




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